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Description
Nombre: Aldrich Galahan

Personalidad:
La personalidad de por si de este muchacho es algo relativamente difícil de definir con exactitud. No es precisamente un caballero, pues muchos modales de los que gozaría uno a él le faltan por haberse criado en las calles, pero aun así es una persona que se guía bastante por sus ideales, que son tales como el honor. Hay muchas cosas que a veces le cuesta entender, pero no por ello es un idiota redomado, todo lo contrarío, es alguien verdaderamente astuto en su medida. Posee un carácter bastante autónomo, por eso mismo no siente la necesidad de deber trabajar con alquien mas a parte de él. La soledad no és un hecho que le moleste demasiado... Es más, siente que así puede trabajar mejor por él mismo. Aun a pesar de su carácter autónomo... Si debe trabajar con alguien mas, no duda en mostrarse cooperativo. Tiende a mostrar bastante respeto a la par que preocupación por sus compañeros y cercanos. Quien le conoce ya puede decir de buenas a primeras que resulta alguien leal. Raramente abandonara los suyos y es capaz de pelear por estos hasta que no pueda mas. Protegerá hasta su mismo
límite, que no es otro que prácticamente la muerte misma, sin que se interponga nada ni nadie.

Pokemon: Mega-Gallade (Shiny)

Nivel: 9

Tipo:

Ataques:
- A Bocajarro
- Hoja aguda
- Tajo Umbrío
- Teletransporte

Sexo: Masculino

Edad: 17

Altura/Peso: 1'87/ 73

Arma: Unas espadas que van atadas a su antebrazo. Las espadas que porta se podría
decir que están tan afiladas que podrían cortar prácticamente todo.
Estas le permiten facilidad de movimiento. (PD: No tanto, a veces se le
engancha con la capa. -?-)

Hablidad: Foco interno. Le impide retroceder.

Deseo/Historia del deseo:
"Ya estoy cansado. Quiero dejar de echarme atrás. Quiero dejar de huir. Quiero... Quiero afrontar mis problemas hasta no poder mas. Tener el valor necesario." Fue un deseo generado prácticamente de su propia vergüenza por huir. Por dar la espalda a quienes le necesitaban. Por darle la espalda a ella.

Historia:
Desde su mas temprana memoria, Aldrich lo primero que recuerda són las calles, lugar en el que se crió y vivió gran parte de su vida. Pero eso no és precisamente algo que recuerde de una manera amarga. Ni mucho menos. Carecía de una figura tanto maternal, como paternal, pero en la zona que el muchacho vivía, era algo bastante usual. Por eso todos los niños se juntaban para sobrevivir de una manera u otra juntos. Algunos
conseguían la comida de una manera mas honrada que otros... Y ese era el caso de Aldrich. Él al menos trabajaba para poder aportar algo
honradamente. Desde buen inicio sabía que robar, era algo que estaba realmente mal. Pero por suerte no era el único que pensaba así. Había
otra muchacha, la hermana menor del que en aquel entonces Aldrich podría definir como su "mejor amigo" una niña menor a él. Aquella niña se
oponía en conjunto al muchacho con el hecho de que su hermano robara. Pero nunca lograban cambiarle de perecer. Así que ambos, al menos
decidieron trabajar, aunque se les pagara poco. Aunque solo fueran unos simples críos.

El era feliz así. Era.

Por lo visto, había demasiada pobreza y un rey demasiado cruel. Que no dudo en enviar a sus guardias a que mataran a toda molestia excesiva. ¿Y que presa mas fácil que unos simples muchachos? Eran pequeños, débiles por la poca alimentación que tenían... Aunque cabía decir que muchos sabían esconderse bien. Al fin y al cabo eran pequeñas ratas de calle. Y eso eslo que hicieron, esconderse. Pero para su desgracia, el escondite donde se encontraba Aldrich y los dos hermanos... No fue suficiente. A pesar que no fueron los primeros en ser encontrados, igualmente los tres
trataron de huir por separado. Pero algo detuvo al muchacho. Un llanto, que aunque era bajo, ahogado no tardo en reconocer, y por eso mismo, aunque debería estar corriendo por su vida, volvió atrás en búsqueda de aquella muchacha... Que no tardo en encontrar, con una grave herida en
la pierna. La hirieron, y aun a pesar de eso no tardo en esconderse. Entre lagrimas la muchacha le pidió a Aldrich que huyera de la ciudad.
Que corriera por su vida. Evidentemente se negó. No la quería dejar. Era alguien de su familia. O preciada a susodicho nivel. Pero... Quizás por
la presión. Por los gritos que se escuchaban a su alrededor... O porque aquella chica ya le estaba exigiendo que se fuera, que no le quedaba
mucho tiempo a ella. Que viviera por los dos... Quizás eso, terminó de convencer... A su cobardía. QUizás no del todo quería seguir en aquel
lugar. Quizás solo quería huir... Y es lo que hizo. Pero poco tiempo tiempo le costo arrepentirse de ello, cuando hecho la vista atrás,
viendo aquellas calles, su hogar, convertido en un lugar de destrucción. Poco tardo de caer de rodillas al suelo, mirando aquel panorama. Él no
hizo nada para cambiar aquello. Solo huyó. El hacer caso de las palabras de ella solo era una excusa para huir. Fue entonces, cuando sumido en
su desesperación, en su propia vergüenza y odio, Espurbey apareció. Ofreciéndole así un deseo.

Esperando darle la esperanza, que en un futuro... Se volvería desesperación nuevamente.

Tiempo después de aquel incidente, fue acogido por una familia, quien pudo darle "buena vida" pues para el el significado de esas dos palabras era tener dos platos de comida al día, que a la edad de sus 17 se mudaría a Inverness, llegando así a la ciudad.

Gustos:
- Disfruta de un día soleado... Mientras el calor de este no resulte excesivo.
- Aunque no lo parezca, es alguien verdaderamente goloso.
- Los animales en general, aunque tiene especial gusto por los felinos.
- Las aventuras... Mientras estas no comporten la perdida de algún ser querido.
- Aparentemente tiene buena mano para el dibujo... Aunque es lo poco que se le da medianamente bien.

Disgustos:
-Estudiar (-?-)
- A causa de su gran sentido del honor, si siente que
le ofenden a él, o alguien cercano, no puede evitar encararse con
levedad.
- Sentirse inútil.
- Recordar aquel "fatídico día"
- La lluvia

Extras:
-Cuando sus padres le encontraron, ni tan solo sabía leer, y en aquel entonces podría tener sobre 12 años.
- Con el paso del tiempo a ido aprendiendo combate cuerpo a cuerpo. Siente que es necesario.
- Es terriblemente malo estudiando. No logra concentrarse de ninguna de las maneras.

Description
Nombre: Aldrich Galahan

Personalidad:
La personalidad de por si de este muchacho es algo relativamente difícil de definir con exactitud. No es precisamente un caballero, pues muchos modales de los que gozaría uno a él le faltan por haberse criado en las calles, pero aun así es una persona que se guía bastante por sus ideales, que son tales como el honor. Hay muchas cosas que a veces le cuesta entender, pero no por ello es un idiota redomado, todo lo contrarío, es alguien verdaderamente astuto en su medida. Posee un carácter bastante autónomo, por eso mismo no siente la necesidad de deber trabajar con alquien mas a parte de él. La soledad no és un hecho que le moleste demasiado... Es más, siente que así puede trabajar mejor por él mismo. Aun a pesar de su carácter autónomo... Si debe trabajar con alguien mas, no duda en mostrarse cooperativo. Tiende a mostrar bastante respeto a la par que preocupación por sus compañeros y cercanos. Quien le conoce ya puede decir de buenas a primeras que resulta alguien leal. Raramente abandonara los suyos y es capaz de pelear por estos hasta que no pueda mas. Protegerá hasta su mismo
límite, que no es otro que prácticamente la muerte misma, sin que se interponga nada ni nadie.

Pokemon: Mega-Gallade (Shiny)

Nivel: 9

Tipo:

Ataques:
- A Bocajarro
- Hoja aguda
- Tajo Umbrío
- Teletransporte

Sexo: Masculino

Edad: 17

Altura/Peso: 1'87/ 73

Arma: Unas espadas que van atadas a su antebrazo. Las espadas que porta se podría
decir que están tan afiladas que podrían cortar prácticamente todo.
Estas le permiten facilidad de movimiento. (PD: No tanto, a veces se le
engancha con la capa. -?-)

Hablidad: Foco interno. Le impide retroceder.

Deseo/Historia del deseo:
"Ya estoy cansado. Quiero dejar de echarme atrás. Quiero dejar de huir. Quiero... Quiero afrontar mis problemas hasta no poder mas. Tener el valor necesario." Fue un deseo generado prácticamente de su propia vergüenza por huir. Por dar la espalda a quienes le necesitaban. Por darle la espalda a ella.

Historia:
Desde su mas temprana memoria, Aldrich lo primero que recuerda són las calles, lugar en el que se crió y vivió gran parte de su vida. Pero eso no és precisamente algo que recuerde de una manera amarga. Ni mucho menos. Carecía de una figura tanto maternal, como paternal, pero en la zona que el muchacho vivía, era algo bastante usual. Por eso todos los niños se juntaban para sobrevivir de una manera u otra juntos. Algunos
conseguían la comida de una manera mas honrada que otros... Y ese era el caso de Aldrich. Él al menos trabajaba para poder aportar algo
honradamente. Desde buen inicio sabía que robar, era algo que estaba realmente mal. Pero por suerte no era el único que pensaba así. Había
otra muchacha, la hermana menor del que en aquel entonces Aldrich podría definir como su "mejor amigo" una niña menor a él. Aquella niña se
oponía en conjunto al muchacho con el hecho de que su hermano robara. Pero nunca lograban cambiarle de perecer. Así que ambos, al menos
decidieron trabajar, aunque se les pagara poco. Aunque solo fueran unos simples críos.

El era feliz así. Era.

Por lo visto, había demasiada pobreza y un rey demasiado cruel. Que no dudo en enviar a sus guardias a que mataran a toda molestia excesiva. ¿Y que presa mas fácil que unos simples muchachos? Eran pequeños, débiles por la poca alimentación que tenían... Aunque cabía decir que muchos sabían esconderse bien. Al fin y al cabo eran pequeñas ratas de calle. Y eso eslo que hicieron, esconderse. Pero para su desgracia, el escondite donde se encontraba Aldrich y los dos hermanos... No fue suficiente. A pesar que no fueron los primeros en ser encontrados, igualmente los tres
trataron de huir por separado. Pero algo detuvo al muchacho. Un llanto, que aunque era bajo, ahogado no tardo en reconocer, y por eso mismo, aunque debería estar corriendo por su vida, volvió atrás en búsqueda de aquella muchacha... Que no tardo en encontrar, con una grave herida en
la pierna. La hirieron, y aun a pesar de eso no tardo en esconderse. Entre lagrimas la muchacha le pidió a Aldrich que huyera de la ciudad.
Que corriera por su vida. Evidentemente se negó. No la quería dejar. Era alguien de su familia. O preciada a susodicho nivel. Pero... Quizás por
la presión. Por los gritos que se escuchaban a su alrededor... O porque aquella chica ya le estaba exigiendo que se fuera, que no le quedaba
mucho tiempo a ella. Que viviera por los dos... Quizás eso, terminó de convencer... A su cobardía. QUizás no del todo quería seguir en aquel
lugar. Quizás solo quería huir... Y es lo que hizo. Pero poco tiempo tiempo le costo arrepentirse de ello, cuando hecho la vista atrás,
viendo aquellas calles, su hogar, convertido en un lugar de destrucción. Poco tardo de caer de rodillas al suelo, mirando aquel panorama. Él no
hizo nada para cambiar aquello. Solo huyó. El hacer caso de las palabras de ella solo era una excusa para huir. Fue entonces, cuando sumido en
su desesperación, en su propia vergüenza y odio, Espurbey apareció. Ofreciéndole así un deseo.

Esperando darle la esperanza, que en un futuro... Se volvería desesperación nuevamente.

Tiempo después de aquel incidente, fue acogido por una familia, quien pudo darle "buena vida" pues para el el significado de esas dos palabras era tener dos platos de comida al día, que a la edad de sus 17 se mudaría a Inverness, llegando así a la ciudad.

Gustos:
- Disfruta de un día soleado... Mientras el calor de este no resulte excesivo.
- Aunque no lo parezca, es alguien verdaderamente goloso.
- Los animales en general, aunque tiene especial gusto por los felinos.
- Las aventuras... Mientras estas no comporten la perdida de algún ser querido.
- Aparentemente tiene buena mano para el dibujo... Aunque es lo poco que se le da medianamente bien.

Disgustos:
-Estudiar (-?-)
- A causa de su gran sentido del honor, si siente que
le ofenden a él, o alguien cercano, no puede evitar encararse con
levedad.
- Sentirse inútil.
- Recordar aquel "fatídico día"
- La lluvia

Extras:
-Cuando sus padres le encontraron, ni tan solo sabía leer, y en aquel entonces podría tener sobre 12 años.
- Con el paso del tiempo a ido aprendiendo combate cuerpo a cuerpo. Siente que es necesario.
- Es terriblemente malo estudiando. No logra concentrarse de ninguna de las maneras.